Guayana es...

Una Guía Rápida de los Principales Atractivos Turísticos de la Zona, su Gastronomía, Hospedajes y Muchas Cosas Más...

lunes, 3 de agosto de 2015

CASTILLOS DE GUAYANA

Por: Jessica Alicia Acosta

Estas importantes fortificaciones han resistido el paso del tiempo y guardan consigo un valor histórico y patrimonial. La historia venezolana sigue latente en muchos de los lugares de la región Guayana. Museos, plazas, parques y hasta algunas casas remontan al ciudadano a aquella época donde la llegada de los españoles y la lucha por conquistar más espacios prevalecen en el tiempo. Uno de estos representativos lugares son Los Castillos de Guayana, fortalezas ubicadas a 45 minutos de Ciudad Guayana, pertenecientes al municipio Casacoima del estado Delta Amacuro. Durante el recorrido al lugar, el visitante puede observar asentamientos campesinos, fincas, el río Orinoco, entre otros paisajes naturales. Los Castillos de Guayana están conformados por dos fortalezas, una de ellas denominada San Francisco de Asís, construida entre los años 1676 y 1682, mientras que la otra lleva el nombre de San Diego de Alcalá, cuya construcción se inició en el año 1734 bajo el mandato del entonces gobernador Juan de Dios Valdez. Sin embargo, durante el primer gobierno del General Joaquín Crespo estos nombres fueron cambiados por Fuerte Villapol y Fuerte Campo Elías como homenaje póstumo a estos dos héroes españoles que murieron en la lucha por la independencia de Venezuela. 

MISIÓN DE LA PURÍSIMA CONCEPCIÓN DEL CARONÍ

Por: Daniel Motta
Las playas del extenso lago de la represa Macagua II, bañadas por las aguas de Caroní, invitan al disfrute y sano esparcimiento de los visitantes. En su orilla sur, reposan las ruinas de la Iglesia de la Purísima Concepción de Caroní, conocida como la Misión del Caroní, silencioso testigo de otra época, cuando la prosperidad de las misiones impulsó la región. Fue fundada en 1724 por los capuchinos catalanes con el nombre de la Purísima Concepción de Suay. En 1729 fue destruida por la peste de viruelas, a poco fue quemada por los ingleses y en 1747 diezmada por una epidemia de sarampión. El pueblo sufrió tantas calamidades y en 1816 estaba poblado por 946 indios guayanos. Según el padre Fray Castellano de Carrocera ésta fue la primera de las prósperas y bien organizadas misiones guayanesas.